El coaching global

Hola,

Os deseo un Feliz Año 2013 lleno de sueños cumplidos.

En esta época de principios de año me gusta hacer dos preguntas:

A la primera pregunta veo que mi sentido de vida, “Estar y vivir el equilibrio vida personal y vida laboral”, me ha permitido vivir momentos muy mágicos como:

- El Amor y Humor que vivimos en familia
- La semana que pasamos en Londres durante los Juegos Olímpicos
- Los 80 años de mi Padre
- La boda de mi sobrino con casi toda la familia reunida
- Una gran fiesta con amigos en casa
- Gracias a mi cliente Repsol en Madrid y a mis alumnos de la primera edición de formación en coaching sistémico en Madrid, esta faceta laboral me ha permitido  conectarme a mis raíces.

Las coincidencias, el azar no existen; todo está en resonancia. Efectivamente era el momento adecuado de conectarme a mis raíces para que estas relaciones continúen vivas. La emigración separa físicamente pero el Amor y el Humor no conocen las distancias. Cuando veo que mis hijos hablan con los hijos de mis primos por Facebook, este nuevo encuentro con mis raíces permite que el tiempo y las relaciones familiares sean  eternos.

A la segunda pregunta me gustaría decir: que he continuado manteniendo mi equilibrio de vida personal y laboral y que mi silencio y escucha sin intención me han permitido  vivir plenamente estas resonancias tanto en los momentos extraordinarios como en los  momentos simples de la vida.

Esta conexión con mis raíces me trae también otras resonancias que llamo “el cambio cultural”. Con mi cliente Repsol contribuyo al desarrollo de su cambio cultural, con mis clientes alumnos de la 1ª edición de formación al coaching sistémico ven otra forma de ser coach y es para ellos un cambio cultural. Es  como si algo me llamara a permitir un cambio cultural a  personas y empresas del país de mis raíces que mi país de nacimiento me permitió aprender cuando me enamoré del coaching sistémico.

Es un momento único para nuestro oficio porque las empresas (sean grandes o PYMES) saben que si continúan sembrando de la misma forma, la cosecha será peor cada año. Las empresas saben que para obtener una cosecha mejor tendrán que sembrar de otra forma. Y, en resonancia sistémica, van buscando algo que permita cambios culturales, cambios innovadores, es decir, cambios sistémicos. Esto es,  re-inventar la empresa.

Y lo más mágico de esta resonancia es que ir hacia mis raíces es para mí un cambio cultural.

A la espera de encontrarte al taller gratuito de este 23 de enero 2013.

Un cordial saludo.

Claude Arribas
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